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jueves, 31 de mayo de 2018

Las brevas

¿Quien no tiene una higuera cerca de casa? En el campo, en los parques de alrededor, en la casa de los abuelos, en la nuestra propia…


Este árbol forma parte de la cultura y gastronomía mediterránea desde hace más de 4.000 años y siempre se ha dicho que su cultivo sólo requiere un clima cálido.

Se calcula que existen unos seiscientos tipos diferentes de higueras diferenciadas entre ellas por el color, forma, cantidad y clases de fruto que dan al año.

“Breval, breveral o bacorera” se denomina a la higuera que da dos clases de frutos al año (brevas de junio a julio e higos de agosto a septiembre), e “higuera común” al árbol que sólo da un fruto (higos) entre los meses de agosto, septiembre y octubre.

Los higos, como ya te he comentado, han sido un alimento esencial para muchas culturas y como no podía ser menos también para la nuestra.

Hay un dicho popular que nos índica muy bien lo que significa este fruto para su comensal “en tiempo de higos, no hay amigos“.

Este fruto, la breva o higo, es muy dulce cuando está maduro y siempre hay que elegir aquél que presenta mayor grado de deterioro y “fealdad”, puesto que resultará mucho más dulce al paladar.

Un fruto que tiene un periodo de consumo muy corto, ya que no madura si se recoge verde y es pasto de los pájaros cuando se pasa un poco de tiempo de maduración en el árbol.

Estos frutos adoptan diversas formas, oval, con forma de pera, achatado en la base y más ancho que alto, que se clasifican según el tono de su piel en tres grupos: los blancos, de color blanquecino, amarillento o verde cuando están maduros; los coloreados, que son los que incluyen frutos de color azulado más o menos claro; y las variedades negras, de color rojo oscuro o negro.

En España, uno de los tipos de higos más apreciados es el denominado “Cuello de dama”, una variedad de higo, que puede ser blanco o negro, reconocida por su piel fina e intenso dulzor, procedente del Valle del Tiétar (Sierra de Gredos) el blanco y de Lérida y Huesca el negro, este último con la piel más gruesa que la de los higos blancos y con una pulpa de un atractivo color morado muy dulce.

Los higos poseen gran cantidad de agua y son ricos en hidratos de carbono (azúcares), por lo que su valor calórico es elevado. También cabe destacar su riqueza en fibra, ácidos orgánicos y minerales como el potasio, el magnesio, el calcio y menos en hierro. Contiene betacarotenos o provitaminas A, un poco de C y grupo B con ácido fólico, y es todo 100% calorías (unas 100 por 100 gramos).

Tanta riqueza en nutrientes hacen del higo una fruta energética, tonificante, remineralizante y muy saludable. Los griegos se lo daban de comer a sus atletas para competir en las Olimpíadas. Lo malo que este fruto está formalmente contraindicado para las personas obesas, y prohibido en toda clase de dietas adelgazantes.

Un fruto muy dado a comer fresco que también se transforma en la cocina en forma de conserva (mermelada, tartas, licores, en seco, etc.) , que ahora mismo se encuentra en su mejor momento.
Fuente: eladerezo.com

El Calabacin

Hoy en el blog de Comprafresca vamos a tratar a fondo uno de nuestros productos de gran valor, el calabacín, con grandes propiedades y apto para tantas recetas...

Folato, vitamina C, vitamina B y beta carotenos. Todo eso y más es lo que aporta el calabacín, una sabrosa verdura que, por su alto contenido en agua, tiene efectos diuréticos y apenas engorda. Todo virtudes para un alimento que admite mil formas de preparación. Gratinado al horno, rebozado y frito, en tortilla, en crema, en guiso, de guarnición… Innumerables son las formas posibles de preparar el calabacín, una sabrosa verdura que da mucho juego entre fogones.

Y así es desde hace muchos años, porque el calabacín se viene cultivando desde la antigüedad en multitud de regiones de todo el mundo. Aunque sobre su procedencia los historiadores no parecen ponerse de acuerdo, se estima que se comenzó a cultivar en Asia, en La India, para ser más concretos. Otros sitúan su origen en América del Sur; de hecho, parece que existen pruebas de que algunas subespecies se cultivaban en México hacia el año 5.000 a de C.

Sabrosas virtudes nutritivas
No es de extrañar que se trate de una planta con tan larga tradición histórica si se tiene en cuenta que es una de las verduras con más virtudes nutritivas, algo que ya era apreciado por nuestros antepasados.

Una de las características alimenticias que lo convierten en un alimento tan recomendable es su alto contenido en vitamina C. Hasta tal punto es así que puede decirse que una porción de 100 gramos de calabacines ligeramente hervidos suministra una cuarta parte del requerimiento diario de esta fundamental fuente de vida.

Del mismo modo, son ricos en ácido fólico, tan necesario para la división celular, la formación de ADN, ARN y proteínas en el organismo. Puede decirse que 100 gramos de la alargada verdura proporcionan aproximadamente 100 mcg de esta vitamina de la que se recomienda se ingieran 400 cada día.

Betacarotenos, fibra y agua
Tampoco se pueden olvidar los necesarios betacarotenos, que el organismo transforma en vitamina A y que también son suministrados por los ricos calabacines. A todas estas propiedades nutritivas hay que añadir su alto contenido en fibra que lo convierten en un producto muy adecuado para los que padezcan del incómodo estreñimiento.

Delicioso y nutritivo, sólo se podía esperar algo más de este alimento: su bajo contenido en calorías. Apenas aporta 15 calorías por cada 100 gramos de producto. Y es que está compuesto en un 95% por agua. De ahí vienen sus propiedades diuréticas y su bajo contenido en grasas. Del mismo modo, esta es la razón por la que se recomienda consumir calabacines en la mayor parte de las dietas de adelgazamiento.

Además de estas características nutritivas, se asocia a los calabacines otras virtudes, más relacionadas con la magia. En efecto, su cultivo se relacionaba en la antigüedad con ritos de prosperidad de las cosechas.

Una especie con muchas variedades
El más común es alargado, verde por fuera y blanco por dentro, pero también los hay de piel amarilla, a rayas o jaspeada, casi siempre comestible. El calabacín es, en realidad, un tipo de calabaza, como su propio nombre indica –diminutivo de esta última-, de la familia de las cucurbitáceas.

Procede de una planta pelosa, de hojas verdes, redondeadas y lobuladas que hoy en día se cultiva en la zona mediterránea, Holanda, Estados Unidos, Francia y Gran Bretaña. Y continúa su expansión, debido a la facilidad con que florece y se desarrolla. Aunque se puede decir que prefiere los lugares soleados, aguanta temperaturas muy variadas.

Generalmente se recolectan a medio hacer, cuando su longitud se sitúa entre los 15 y los 20 cm, aunque pueden llegar a alcanzar los 40 cm de largo, 12 cm de diámetro y los 2 kilos de peso.

Recetas

Calabacin a la italiana
Ingredientes
1 calabacin 250 gr. de queso para fundir en lonchas tomate frito (mejor casero) pimienta negra molida orégano harina sal

Se corta el calabacín en rodajas finas, se sazonan, se enharinan ligeramente y se fríen en aceite caliente, dejándolas después escurrir sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite. En un bol, mezclar el tomate frito con la pimienta y el orégano. En una fuente de horno, se colocan los calabacines en forma de capas sucesivas, alternando una capa de calabacines, otra del tomate mezclado, y otra de queso, y así hasta la altura que se desee, terminando siempre con una capa de queso, y espolvoreando la superficie con orégano. Se mete a horno fuerte hasta que se funda el queso (aprox. 15 minutos).

Calabacines rellenos
Ingredientes
  1. 4 calabacines grandes
  2. 6 lonchas de bacón
  3. 1 cebolla
  4. Nata ó bechamel
  5. Queso rallado
Lavamos los calabacines y los cortamos por lla mitad (a lo largo). Vaciamos la carne del calabacín y seguimos sofriendo, y por último añadimos la nata o bechamel, se mezcla todo bien en la sartén. Calentamos el horno. Cubrimos las bases del calabacín con la mezcla de la sartén, espolvoreamoscon el queso rallado, horneamos hasta que la base del calabacín esté cocida.

Calabacin en besamel
Ingredientes
  1. 500 g. de calabacín
  2. Leche
  3. Harina
  4. Aceite o mantequilla
  5. Queso rallado
  6. Sal
Se pelan los calabacines, se cortan en taquitos y se ponen a cocer con sal. Cuando están tiernos se escurren y se reservan. Aparte se prepara una besamel clarita. Se colocan los calabacines en el fondo de cazuela o recipiente refractario.
Encima se vierte la besamel y se espolvorea con el queso rallado. Se mete al horno caliente unos pocos minutos. Es un suave y agradable primer plato.

Podéis encontrarlo en nuestra tienda pinchando aquí

lunes, 28 de mayo de 2018

Estas son las ofertas para esta semana en Comprafresca.es


 


OFERTAS 


Albaricoque
Bandeja: 700 gr
2,79€
3,99€/kilo

Melón Cantaloupe
Pieza: 1300 gr
3,88€
2,99€/kilo

Bio Tomate
Bandeja: 500 gr
1,29€
2,58€/kilo


jueves, 24 de mayo de 2018

Beneficios de la cereza que no sabías

Esta es una de las frutas más “poderosas” que existe. Nos aporta excelentes beneficios nutricionales y además es baja en calorías (una sola taza proporciona 90 cal).

Desde hace años la cereza se considera una de las mejores frutas para depurar el organismo, liberándolo de las toxinas. Sus propiedades limpiadoras son gracias a las antocianinas, lo que le dan ese pigmento morado. Estas son capaces de neutralizar los radicales libres, quienes son responsables de enfermedades degenerativas tales como el Alzheimer, cáncer, complicaciones cardíacas y artritis.
La vitamina C y los aminoácidos que contiene son ideales para la prevención del envejecimiento de la piel, el cuidado del cabello y de las uñas. También protege de las arrugas, la flacidez y las manchas de la dermis.

A continuación algunos de los beneficios de la cereza puntuales que quizá no sabias…
-Son ricas en vitaminas C y E, hierro, fibra, ácido fólico, potasio y magnesio.
-Popularmente hablando, se dice que son el “alimento para el cerebro” por excelencia, ya que ayuda en la salud de la mente, para prevenir la pérdida de la memoria o Alzheimer.
-Permiten reducir los síntomas de la gota y la artritis, así como la inflamación y la retención de líquidos.
-Se cree que el consumo de cerezas ayuda a los diabéticos a evitar complicaciones en la vida, desde pérdida de la visión hasta cataratas.
-Son muy buenas para la salud digestiva, al ser una fuente inmejorable de fibras.
-Al aportar poca cantidad de calorías, son una elección maravillosa para las dietas, para la merienda, entre comidas o postres al querer bajar de peso.
-Las cerezas reducen el dolor ya que contiene antiinflamatorios.
-Ayudan a eliminar el ácido úrico de la sangre
-Son laxantes debido a su aporte de agua, potasio y fibra.
-Evitan la degeneración celular por su riqueza en flavonoides,
-Se puede aprovechar el cabo de las cerezas para realizar una infusión, la cuál actúa en los casos de resfrío, tos convulsa, catarro, bronquitis, anemia, cistitis, ictericia y enfermedades de la garganta.
-Se recomiendan en los pacientes con hipertensión, pacientes con cólicos de riñón y enfermos cardíaco o renales.

sábado, 19 de mayo de 2018

Melón Galia, todo dulzura.

El origen

La variedad de melón Galia no es una variedad histórica, sino un cruce entre dos variedades desarrollado en 1970 por Zvi Karchi en Israel. Su nombre es el femenino de la palabra “Gal” que significa “ola” en israelita. Para el cruce se emplearon las variedades Cantalupe y Honedew. Como se puede ver, de la primera cogió la piel exterior muy rugosa y estriada y de la segunda ese color verde tan característico.

El aspecto

El melón Galia es un melón pequeño y esférico, del tamaño de una pelota de balonmano, y cuyo peso no suele sobrepasar el kilo.

La piel exterior es de un color amarillo terroso, con algunos toques de verde, y está surcada por numerosas estrías de color amarillo claro, que le confieren un textura muy rugosa. Esta piel exterior es dura —aunque menos que en el melón de piel de sapo— y mucho más fina, por lo que cede ligeramente si la apretamos con los dedos.

Una vez abierto sorprende por su pulpa abundante de un color verde intenso (sobre todo si la pieza está madura) que arrincona a las pepitas, de un amarillo mostaza, en una pequeña zona del centro.

Su piel fina y su carne no demasiado firme hacen que cortarlo sea una tarea extremadamente sencilla en comparación con otras variedades de melón o con la sandía.

La degustación

Aunque para gustos, melones, la Galia es una de las variedades de melón que más disfruto, principalmente por su sabor dulce y su carne que se deshace en la boca.

Además, su color verde intenso produce un cruce de cables en el cerebro, acostumbrado a que ese color signifique la fruta aún no está madura, por lo que su dulzor sorprende aún más.

Es ideal para comer solo a cualquier hora del día y, en mi opinión, la variedad ideal para mezclar con jamón.

viernes, 11 de mayo de 2018

Los 8 beneficios del albaricoque

Llega la temporada de los albaricoques. 


¿sabías que además de estar riquísimos tienen muchos beneficios para tu salud. Esta fruta tan apetecible en verano puede protegerte contra el cáncer, ayudarte a perder peso o evitar que tengas un ataque al corazón.
Cuanto más orgánico sea el albaricoque mejor conservará todas sus propiedades beneficiosas ya que los pesticidas y herbicidas eliminan, en muchas ocasiones, sus nutrientes. 

Agudeza visual

Los albaricoques son ricos en betacarotenos, un componente que se convierte en vitamina A en el cuerpo y ésta es esencial para la buena salud de nuestra retina.

Protección contra las toxinas

Los albaricoques te ayudan a eliminar las toxinas del colon, los riñones, el estómago y el hígado gracias a su alto contenido en fibra. También son ricos en potasio, que reducen la posibilidad de contraer úlceras.

Te ayudan a perder peso

A parte de tener un efecto saciante, los albaricoques contienen azúcares naturales de la fruta que evitará el aumento de los niveles de azúcar en sangre. 

Anti cáncer

Son ricos en antioxidantes, particularmente en ácido cloro-génico, conocido por proteger al organismo del cáncer y otras enfermedades crónicas. 

Hola corazón

Los albaricoques son ricos en hierro y vitamina E, sustancias esenciales para mantener un corazón sano. 

Limpia los riñones

El potasio de los albaricoques en un estupendo componente para reducir las enfermedades de riñón. Comer esta fruta previene de la nefritis y ayuda a eliminar las piedras en el riñón.

Piel bonita

Los niveles de vitamina C de esta fruta son muy altos y esta vitamina es un ingrediente esencial para mantener una piel joven y sana. 

Antioxidantes

Contienen desde licopeno a vitamina C pasando por ácido cloro-génico. Todos estos antioxidantes harán que tu cuerpo se mantenga en forma y te protegerán de los radicales libres causantes de enfermedades como el cáncer, las auto inmunes y de envejecimiento.

Receta de sopa de melón con albaricoque


Hola amig@s, ya empieza a subir la tempera, que mejor que alimentarse con platos sanos, ricos, y frescos. Hoy os dejamos una receta de melón y albaricoque. Esperamos que os guste y pongáis en práctica.

Este postre puede ser un básico de verano, sirve como refrescante después de una comida o como merienda muy completa. Contiene poco azúcar, ya que las frutas ya llevan una buena parte, y por tanto, no hace falta añadir más.

Ingredientes:
Para la sopa de melón:
  • Un cuarto de melón, unos 500 gr bien maduro
  • 40 gr azúcar
  • El zumo de 1 limón
  • Para el helado de albaricoque:
  • 300 gr de crema catalana
  • 400 gr de pulpa de albaricoque
  • 20 cl de licor de naranja
  • 40 gr de azúcar
Para la gelatina de mango y naranja:
  • 1 mango
  • Zumo de naranja
  • 1/2 cucharada de agar agar en polvo
  • 1 molde de silicona
Elaboración:
Empezaremos por el helado, esto puede ser el día anterior. Hacemos una crema catalana con 500 cc de leche, 40 gr de almidón, 75 gr de azúcar, canela y limón. Cuando esté fría la ponemos en la nevera y dejamos reposar. Limpiamos, pelamos y deshuesamos los albaricoques, los reducimos a puré con ayuda de una batidora o vaso.
Echamos la mezcla de la crema, el puré de fruta y el azúcar a la heladora, una vez ya está hecho lo guardamos en el congelador.
Para preparar la gelatina pelaremos y trocearemos el mango, dispondremos pequeños trocitos en los moldes.
En un cazo pondremos el zumo de naranja (200 cc) y 1/2 cucharada sopera rasa. Dejamos enfriar unos instantes y lo vertemos en los moldes que hemos puesto los trocitos de mango. Dejamos enfriar 2h en la nevera.
Por último hacemos la sopa de melón, en un vaso batidora, o termomix, ponemos el melón troceado, el zumo de limón y el azúcar (podemos poner menos si el melón es muy dulce).

Montaje del plato:
Se pone la sopa de melón en el fondo del plato, la bola de helado encima y la gelatina de mango y naranja.

Es un postre sencillo que permite que lo preparemos días antes y sólo dejaríamos la sopa de melón para el último momento.
Espero que os guste.


Fuente:petitchef.es

domingo, 6 de mayo de 2018

Prevenciones contra el Cáncer

La dieta tiene que aportar otros factores no nutrientes, contenidos fundamentalmente en alimentos de origen vegetal, como protección al estrés oxidativo y la carcinogénesis. El interés en la nutrición y su relación con el cáncer tiene su origen en estudios realizados en la década del sesenta, en los que se relacionó una dieta rica en fibras con un riesgo reducido de cáncer de colon. Desde entonces nuevos estudios han añadido otros elementos de la dieta en la prevención del cáncer. 

Además de la fibra, los alimentos naturales como frutas, vegetales y legumbres, han sido descritos como agentes protectores para la salud, y en particular contra el cáncer. La ingestión de frutas y vegetales ayuda a un buen suministro de fibra, vitaminas como la C, caroteno, en particular los beta-carotenos, así como otras sustancias llamadas fitoquímicas. Los estudios indican que una dieta alta en fibra y en estos nutrientes puede reducir el riesgo de desarrollar algunos tipos de cáncer.
Por otra parte, el consumo de fibras y grasa de origen vegetal son importantes para lograr un equilibrio de nutrientes sanos que garanticen la prevención de esta enfermedad. 

Importancia de la fibra como elemento protector
La fibra dietética tiene como función arrastrar una parte de las sales biliares que se sintetizan en el hígado a partir del colesterol. Ellas son excretadas a través de las heces en lugar de ser reabsorbidas, y con eso se hace necesario utilizar más colesterol para la síntesis de nuevas sales biliares. La asociación de la fibra con esas sales evita que ellas se encuentren en solución libre, y disminuya su efecto sobre la pared intestinal, que favorece el desarrollo de tumores.
La fibra también ejerce otros efectos relevantes en la reducción del riesgo de cáncer. En toda dieta existen compuestos potencialmente carcinogénicos, que al mezclarse con la fibra, no pueden reabsorberse en el organismo, y por tanto no producen efectos adversos sobre las células intestinales. Además, las bacterias del intestino fermentan una parte de la fibra dietética y de los productos de este metabolismo bacteriano, y realizan una acción antiproliferativa, por lo que ofrecen mayor protección frente al desarrollo del cáncer de colon.
Algunas poblaciones africanas han sido ejemplos de esta relación dieta-cáncer. En ellas existe un elevado consumo de fibra dietética y una baja incidencia de enfermedades tumorales. 

Encontrar la fibra dietética
Es importante tener en cuenta que la fibra se encuentra en los productos naturales en dos formas: soluble e insoluble. Las fibras solubles atraen agua, de ahí que durante la digestión retrasen la absorción de nutrientes en el estómago e intestino. Este tipo de fibra aparece en las legumbres como frijoles, lentejas, garbanzos, en hojuelas de cebada, semillas y frutos secos, así como en algunas frutas y vegetales. La fibra insoluble se halla en el trigo, vegetales y granos enteros, y es la encargada de acelerar el paso de los alimentos por el estómago y los intestinos.
En los últimos años ha cobrado importancia el consumo de alimentos integrales: el salvado de trigo y otros productos, vegetales como la espinaca, cebolla, berro y frutos secos, así como ingerir las cáscaras de frutas en las que sea posible, como fuente de fibra en nuestra alimentación. La fibra garantiza además el suministro de carbohidratos de digestión lenta que mantienen las reservas necesarias de energía para el organismo.
Protección en el consumo de grasas en la dieta

Dentro de las grasas poliinsaturadas se encuentran los ácidos grasos omega 3, reconocidos protectores de la salud. Son ácidos grasos esenciales que no pueden ser sintetizados por el organismo y deben ser recibidos con la alimentación. Son considerados agentes protectores contra el cáncer de mama, ovario, útero y próstata.
Los ácidos grasos de origen vegetal son, en general, ricos en grasas insaturadas, y se consideran imprescindibles para garantizar el correcto funcionamiento del organismo y como eficientes agentes contra el cáncer. Se hallan en los aceites de soya, oliva, maíz y girasol, los frutos secos como semillas de oleaginosas, y los peces de agua fría conocidos como pescados azules, dentro de los cuales están el jurel, la sardina, el arenque y el atún.
Por su importancia, actualmente se fabrican alimentos enriquecidos con ácidos grasos omega 3.
Los principios del equilibrio, variedad y moderación en el consumo de grasas constituyen la base de una dieta sana. Conociendo los tipos de grasas que contienen los alimentos se puede compensar el consumo de productos ricos en grasas y evitar el aumento excesivo de peso y la obesidad, reconocidos factores que influyen en el desarrollo del cáncer de mama, endometrio, próstata y colon. 

Las frutas, vegetales, legumbres y hortalizas como protectores del cáncer
Los alimentos de origen natural como frutas, vegetales, legumbres y hortalizas aportan a nuestra dieta agua, vitaminas, minerales, y evitan un exceso de grasas y proteínas. Han sido asociadas dietas pobres en frutas y verduras con cáncer de pulmón, laringe, esófago, estómago, colon, recto y páncreas. Estos alimentos son fuentes de antioxidantes naturales. Es por ello que en el mundo se ha investigado el papel de estos antioxidantes dentro de enfermedades de máximo impacto como el cáncer.
La respiración de oxígeno es esencial en la vida celular, pero se producen como consecuencia los llamados radicales libres y otras moléculas de oxígeno reactivas, que de no ser controladas adecuadamente pueden ocasionar efectos negativos por su capacidad de alterar el material genético, las proteínas y las grasas.
El cáncer no es más que el daño que se produce en las células corporales cuando hay genes dañados. Ellas pierden la capacidad de reaccionar normalmente y se multiplican de forma indiscriminada.
El papel de los antioxidantes es capturar y neutralizar las sustancias que son capaces de deteriorar macromoléculas de las células por medio de la oxidación. Los estudios sobre antioxidantes naturales se centran en vitaminas como la E, C, carotenoides, oligoelementos como el selenio y el zinc, y además los fitoquímicos.
El término fitoquímico agrupa a un listado de sustancias químicas producidas por las plantas. Son consideradas como metabolitos secundarios porque no ejercen una función directa en las actividades fisiológicas fundamentales, tales como el crecimiento o la reproducción.
Con el desarrollo de la industria alimentaria y el aumento del consumo de alimentos refinados y fáciles de comer, el hombre se ha privado de la protección que nos ofrecía la naturaleza, y a la que estaban adaptados nuestros genes por herencia histórica. La ciencia ha comprobado que la dieta hipercalórica y pobre en fitoquímicos y fibra está directamente relacionada con la mayoría de los casos de cáncer y otras enfermedades. Como decían nuestras abuelas, el secreto está en la naturaleza. 


Los fitoquímicos en la dieta
Actualmente cientos de fitoquímicos son reconocidos con impactos positivos en la salud humana. Ellos son los responsables de los colores vivos y brillantes de las frutas y verduras, y de su sabor. Entre los fitoquímicos podemos encontrar polifenoles como los lignanos, taninos y flavonoides, además de isotiocianatos y antocianos.
Los flavonoides son pigmentos que les confieren el color amarillo a frutas y verduras. Se hallan en las partes más jóvenes y expuestas al sol, pues la luz solar favorece su síntesis. Tienen un efecto protector a través de la reacción con numerosas enzimas del organismo. Algunas afectan la actividad de sustancias cancerígenas y facilitan de esta forma su eliminación, y además impiden el crecimiento de células tumorales.
Son ricos en flavonoides alimentos como la soya, verduras de hojas verdes como la espinaca, lechuga y col, entre otras. Las frutas maduras, sobre todo los cítricos, son abundantes en estos fitoprotectores concentrados en su cáscara. Otras frutas como las cerezas o las manzanas contienen flavonoides, pero en menor cantidad.
Las uvas y sus subproductos como el vino tinto son ricos en fitoquímicos como los antocianos, responsables de su característico color rojo-violáceo.

Los vegetales de la familia crucífera poseen flavonoides, vitamina C, minerales y fitoestrógenos, estos últimos asociados con los llamados cánceres hormona-dependientes. La palabra crucífera se aplica a una familia de vegetales que florecen en forma de cruz. Algunas especies son ornamentales, pero para nuestra buena suerte muchos son comestibles. Desde la pasada década del setenta aparecieron los primeros estudios que apoyaban los beneficios anticancerígenos de las crucíferas, pero en la actualidad son ubicadas en lugar privilegiado de la dieta. Estos vegetales tienen efectos protectores adicionales al ser ricos en fibras, de ahí que ayuden a evitar la constipación y la irritación de la pared intestinal. Son miembros de esta familia de crucíferas la col y sus parientes como la coliflor, nabos y col de Bruselas, y se reconocen dentro de los alimentos que más nos protegen contra el cáncer. Las causas para esta afirmación están basadas en que se les responsabiliza por la eliminación de estrógenos, factores desencadenantes del cáncer de mama, pulmón, ovario, estómago y colon.
El ajo, la cebolla y otros miembros del género Allium son ricos en sulfuros y otras sustancias protectoras.
El ajo es el mejor anticanceroso de todas las plantas. Posee más de cuarenta compuestos que inhiben el crecimiento tumoral. Se conoce que el ajo también disminuye el riesgo de cáncer de diferentes órganos.
La cebolla es otro potente anticancerígeno. Por eso no debe faltar en las comidas, preferiblemente cruda.
Los terpenos, contenidos en muchos condimentos y responsables de su sabor, son útiles agentes químicos preventivos del cáncer. Una dieta que contemple condimentos naturales proporcionará una variedad de sustancias que promueven la salud y protegen contra las enfermedades crónicas.
El cacao se considera un alimento rico en fitoquímicos antioxidantes, con efecto protector, y el té verde lo es en flavonoides, capaces de fortalecer las defensas inmunológicas del organismo para enfrentar enfermedades crónicas.
Resulta por tanto evidente que la estantería multicolor de alimentos naturales debe formar parte de una dieta sana y equilibrada. 


Relación de los fitoestrógenos con el cáncer
La salud hormonal es la clave contra el cáncer de mama, ovario, útero, próstata y testículo. Las mujeres son más afectadas por el cáncer del sistema reproductor que los hombres. Se ha reconocido que el correcto funcionamiento hormonal podría terminar con 95% de todos ellos.
Los fitoestrógenos son fitoquímicos con estructura similar a la de los estrógenos. En las plantas tienen papel antioxidante, mientras que en animales y humanos se cree que funcionan como antagonistas y sustitutos de los estrógenos. Por ello son considerados como estrógenos benignos y protectores.
Estas sustancias vegetales activas que reproducen en el organismo características propias de las hormonas, inhiben además la proliferación de células cancerígenas ya existentes.
Los fitoestrógenos más estudiados están en grandes cantidades en alimentos como el trigo, frutas, leguminosas y verduras. Se considera que las lentejas, garbanzos y frijoles en general, son una buena fuente de fitoestrógenos.
Existen diversos estudios epidemiológicos que comparan la dieta occidental con la oriental, y una de las diferencias fundamentales entre la dieta japonesa y la europea radica en la cantidad de productos basados en soya que los primeros ingieren. Por ello se ha asociado a la soya como una buena fuente de fitoestrógenos en la prevención del cáncer estimulado por hormonas, y se ha reconocido que su potencial anticancerígeno se debe a la inhibición de ciertas enzimas implicadas en la diferenciación y el crecimiento tumoral.
El consumo de productos derivados de soya como el yogur, leche y queso puede ser un factor protector para el cáncer, así como para impedir su desarrollo.

Los carotenoides como fuente de protección
Además de los fitoquímicos, las frutas, vegetales y hortalizas son fuente de sustancias como los carotenoides, compuestos con excelentes propiedades antioxidantes. La mayoría de ellos se transforman en vitamina A dentro del organismo. El más estudiado es el beta-caroteno, aunque otros como el licopeno y la luteína brindan una protección similar o superior para la salud. Se recomienda el uso de los carotenoides para un mejor funcionamiento, junto con los fitoquímicos y las vitaminas. Aparecen en alimentos como la zanahoria, la calabaza, la papa, el tomate y otras frutas, y verduras de hojas verdes, amarillas, naranjas y rojas como las espinacas, el bróculi, el mango, la fruta bomba y el melón. Los beta-carotenos o provitamina A se han relacionado con la disminución del riesgo de padecer cáncer de pulmón.
El tomate es una maravillosa fuente de protección al organismo. Contiene cientos de compuestos fitoquímicos distintos, algunos de los cuales le proporcionan sus características organolépticas de olor, textura y sabor. Es una fuente de licopeno, sustancia con poderosa acción anticancerosa. Se ha reconocido su papel en la disminución del riesgo de padecer cáncer de próstata.
Es constituyente del tomate, además, la luteína, que de todos los carotenos es la más reconocida fuente de prevención contra el cáncer, fundamentalmente de colon. Son fuente de luteína la espinaca, la lechuga y la naranja.
Considerando todas estas evidencias, las dietas recomendadas son las que incluyen una alta proporción de alimentos de origen vegetal, entre los que destacan las legumbres, vegetales y frutas como vía de prevención del cáncer. Ellos comparten en su composición una serie de compuestos naturales que se complementan y unen para ayudar al desarrollo de una vida sana.
Es importante resaltar que los nexos entre dieta y cáncer no se ciñen solo a lo que se come, sino a lo que falta en la mesa. Por ello, utilizando la gama multicolor que nos ofrece la naturaleza con alimentos de origen vegetal, estaremos haciendo uso de los recursos desarrollados por las plantas a lo largo de millones de años para defenderse del entorno.
Hagámonos eco de una frase célebre, aquella que dice que siempre hay un libro abierto para todos los ojos: la naturaleza. Recorramos ese libro puesto a nuestra disposición. Solo así haremos posible el milagro de la salud y la mejor batalla contra el cáncer: la prevención.

viernes, 4 de mayo de 2018

PASTEL DE NÍSPEROS

Esta receta es muy sencilla de realizar, y se puede hacer con cualquier compota, mermelada o fruta en almíbar , de cualquier fruta.

Necesitamos: 
  • medio litro de nata 
  • dos sobres de cuajada 
  • un vasito de leche, o de leche evaporada (para disolver los sobres de cuajada) 
  • 50gr de azúcar ( no será necesario más porque la fruta es en almíbar) 
  • 150gr de nísperos en almíbar (triturados) 
  • caramelo para el molde 
*Cubrimos de caramelo el molde que vayamos a usar y reservamos.

*Disolvemos la cuajada en el vaso de leche evaporada y reservamos

*Ponemos a calentar la nata con el azúcar y los nísperos triturados.

*Cuando esté todo a punto de hervir, agregamos la leche evaporada con la cuajada y removemos suavemente sin parar.

Dejamos que llegue a hervir y retiramos del fuego hasta que temple un poco 
Volvemos a llevarlo a ebullición hasta que veamos que va espesando un poco.

Vertemos en el molde y dejamos enfriar.


Es un postre muy sencillo de realizar y que como dije al principio, podemos hacer con otras clases de fruta en almíbar.
Espero que os guste.

El Nispero

¿Sabías que... el níspero forma parte de la Alimentación Mediterránea?


Esta fruta, con un 86% de agua, nos ayuda a hidratarnos a la vez que nos sirve de alimento

El níspero es uno de esos árboles frutales fáciles de encontrar en muchos huertos. Son árboles que destacan por una producción abundante y frutos grandes en contra posición al poco tiempo que podemos disfrutar de su fruta. Mayo y junio son los meses idóneos para esta fruta tan de temporada.

Fue hace más de dos mil años cuando marinos mercantes, procedentes de China, introdujeron los nísperos en la península ibérica por el puerto de Sagunto (Valencia). Desde aquí se extendió por todo el Levante y Sudeste de España, encontrando el mejor hábitat para su propagación y desarrollo en zonas del litoral mediterráneo, haciéndose un hueco hoy en día entre los alimentos de temporada de la Alimentación Mediterránea.
Esta fruta, con un 86% de agua, nos ayuda a hidratarnos a la vez que nos sirve de alimento. De sus propiedades nutricionales podemos destacar su bajo valor calórico, 33 Kcal/100gr. del fruto, lo cual es una fruta interesante para aquellas personas que quieren controlar su peso. Además, contienen carotenoides -que le aportan el característico color naranja-, un alto contenido en potasio –aportándonos el 14% de nuestras necesidades diarias de potasio- y sodio. Su contenido en fibra soluble está indicado para ayudar a regular el tránsito intestinal. Además contiene pectina, ideal para la elaboración de confituras y mermeladas por sus propiedades gelificantes.

El níspero se usa como fruta fresca por su agradable sabor, sólo o en ensaladas de frutas. También en tartas de frutas y pastelería, mermeladas, jaleas y en almíbar.