
Encontramos la Lasaña de espinacas y piña en el blog El delantal verde, y ayer nos hemos acorado de ella pensando en qué hacer con nuestras espinacas frescas. La verdad es que nos ha encantado el plato, aunque lo hemos variado a razón de nuestra despensa y paladar. Aún nos hemos quedado con las ganas de incluir un poco de salsa de soja, será la próxima vez.
Ingredientes (4 comensales)
12 placas de pasta de lasaña (la nuestra era de espinacas, pero puede ser normal), 450 gramos de espinacas frescas, 250 gramos de queso fresco, 3 rodajas de piña en su jugo, 1 cebolla, 4 dientes de ajo, cilantro fresco, muselina de pesto (para aprovechar la que preparamos para el bacalao), queso emmental rallado, pimienta negra, aceite de oliva y sal.
Elaboración
Prepara la pasta de lasaña según indica el paquete, las nuestras son de las que están precocidas y sólo necesitan ser rehidratadas.
Pica la cebolla, los ajos y el cilantro. Corta la piña también en pequeños trozos y desmenuza el queso fresco. Sofríe en una sartén grande o cazuela la cebolla, cuando empiece a transparentar agrega los ajos, cuando se doren incorpora la piña con el cilantro (una combinación genial) y las espinacas frescas, salpimenta al gusto y ve moviendo las espinacas para rehogarlas uniformemente.
Cuando estén listas, incorpora el queso fresco desmenuzado y rectifica de sal y pimienta si fuera necesario.
Unta la bandeja en la que harás la lasaña con un poco de aceite de oliva y dispón una capa de placas de pasta, cubre con la mitad de las espinacas con piña y queso fresco y vuelve a cubrir con la pasta. Repite la operación cubriendo con el resto de las espinacas y pon de nuevo una capa de pasta.
Termina cubriendo con la muselina de pesto o en su defecto, con salsa de tomate o salsa bechamel, espolvorea el queso rallado e introduce en el horno (con el gratinador) precalentado a 200º C. Deja gratinar hasta que la superficie esté dorada.
Emplatado
Se pueden hacer lasañas individuales o como en nuestro caso, una lasaña grande que después se corta en porciones por comensal. Corta con cuidado la lasaña, disponla en los platos y decórala con unas hojas de cilantro, un hilo de aceite de oliva y semillas de amapola.
Ingredientes (4 comensales)
12 placas de pasta de lasaña (la nuestra era de espinacas, pero puede ser normal), 450 gramos de espinacas frescas, 250 gramos de queso fresco, 3 rodajas de piña en su jugo, 1 cebolla, 4 dientes de ajo, cilantro fresco, muselina de pesto (para aprovechar la que preparamos para el bacalao), queso emmental rallado, pimienta negra, aceite de oliva y sal.
Elaboración
Prepara la pasta de lasaña según indica el paquete, las nuestras son de las que están precocidas y sólo necesitan ser rehidratadas.
Pica la cebolla, los ajos y el cilantro. Corta la piña también en pequeños trozos y desmenuza el queso fresco. Sofríe en una sartén grande o cazuela la cebolla, cuando empiece a transparentar agrega los ajos, cuando se doren incorpora la piña con el cilantro (una combinación genial) y las espinacas frescas, salpimenta al gusto y ve moviendo las espinacas para rehogarlas uniformemente.
Cuando estén listas, incorpora el queso fresco desmenuzado y rectifica de sal y pimienta si fuera necesario.
Unta la bandeja en la que harás la lasaña con un poco de aceite de oliva y dispón una capa de placas de pasta, cubre con la mitad de las espinacas con piña y queso fresco y vuelve a cubrir con la pasta. Repite la operación cubriendo con el resto de las espinacas y pon de nuevo una capa de pasta.
Termina cubriendo con la muselina de pesto o en su defecto, con salsa de tomate o salsa bechamel, espolvorea el queso rallado e introduce en el horno (con el gratinador) precalentado a 200º C. Deja gratinar hasta que la superficie esté dorada.
Emplatado
Se pueden hacer lasañas individuales o como en nuestro caso, una lasaña grande que después se corta en porciones por comensal. Corta con cuidado la lasaña, disponla en los platos y decórala con unas hojas de cilantro, un hilo de aceite de oliva y semillas de amapola.
Fuente: www.gastronomiaycia.com